200 - 1790
Santiago antes de Santiago
La investigación “Mapocho incaico” llevada a cabo por el antropólogo Rubén Stehberg y el historiador Gonzalo Sotomayor en 2012, dan cuenta que en Santiago se asentó un centro administrativo inca, entre el cerro Huelén, actual Santa Lucía, por el oriente; los dos cauces del río Mapocho por el norte y sur; y por algún punto intermedio entre las actuales calles Banderas y Brasil por el poniente.
Plano de la Chimba, Valle del Mapocho. Realizado por Francisco Luis Besa y entregado al tribunal de la Real Audiencia el 26 de Agosto de 1641. En Stehber, Sotomayor (2012).
Pereira antes del Pereira
Los estudios arqueológicos realizados en el proceso de restauración permitieron detectar una efímera ocupación prehispánica atribuible al período Alfarero Temprano de unos mil a dos mil años de antigüedad, a través de fragmentos de vasijas cerámicas, de un fragmento de punta de flecha y de elementos de piedra de carácter utilitario y doméstico, así como de un adorno de cerámica que se usaba bajo el labio (“tembetá”) y un fragmento de pipa. También se detectó evidencia indígena cercana a la época de contacto con los españoles, a través de un fragmento de punta de flecha y de fragmentos de vasijas cerámicas, uno de los cuales fue fechado en 1505 d.C. Estas vasijas de tradición indígena se siguieron usando en la época colonial y en el siglo XIX.
Excavaciones arqueológicas en el Palacio Pereira, 2012-2015. Archivo Palacio Pereira.
A través de las excavaciones arqueológicas se descubrieron evidencias de una casa colonial, de la que excepcionalmente se conservó parte de sus muros de adobe, incluidos restos de pintura y papel mural del siglo XIX, así como distintos pisos de ladrillo y de piedra huevillo, tradicionales de esa época. También se registra una de las acequias de ladrillo que atravesaban las manzanas del centro de la ciudad y fragmentos de vasijas de greda, mayólica, loza y porcelana, así como desechos de alimentos consumidos durante el periodo colonial.
Plano de Santiago de 1850, “Santiago de Chile en torno a 1850. El plano de planta urbana como instrumento revelador de su forma general”, Germán Hidalgo, José Rosas y Wren Strabucchi, ARQ (Santiago) no.96, 2017.
1870 - 1875
Proyectando una nueva ciudad
El intendente Benjamín Vicuña Mackenna inicia el “Plan de Transformación de Santiago” proyecto que contempla la modernización de la ciudad implicando profundos cambios urbanos. Las obras principales realizadas fueron Canalización del Mapocho, Construcción del Camino de Cintura, la transformación de los barrios pobres de la zona sur, la dotación de agua potable y otros aspectos relacionados al orden racional del espacio (nuevas manzanas y calles), conectividad (calles adoquinadas para transporte y líneas de tranvía), seguridad (alumbrado público) y espacios de recreación (parques y transformación del Cerro Santa Lucía).
El objetivo de este proyecto, inspirado en los principios de la modernidad europea, con referentes como el París de Hausmann, busca además solucionar los problemas de organización urbana ante el crecimiento explosivo y sin planificación que había generado la migración campo-ciudad.
Plano de Santiago, 1875, Ernest Ansart. Colección Biblioteca Nacional.
1872
Un palacio para los Pereira
El senador Luis Pereira Cotapos encarga la proyección de su residencia particular, el Palacio Pereira, al arquitecto francés Lucien Ambroise Henault, quien es parte de los contactos del Estado para construir la nueva arquitectura de la República y responsable de otros edificios como la Casa Central de la Universidad de Chile, el Teatro Municipal, el Portal Fernández Concha y el hermoseamiento del Cerro Santa Lucía. El edificio es contemporáneo a otras obras como el Palacio Alhambra, Palacio Matte, y la Casa Goycolea. El palacio muestra una innovación tipológica en el patio, dando cuenta de la transición entre el sistema consecutivo de patios de los solares coloniales y los denominados «palacios» que comienzan a construirse al norte de la Alameda en la segunda mitad del siglo XIX.
En 1874 se termina de construir el Palacio Pereira, aunque en rigor el edificio sigue experimentando transformaciones por décadas. Una de ellas se produce con la construcción del segundo piso que da hacia calle San Martín. La nueva planta alta se levantó para acoger a los hijos e hijas de los Pereira Cotapos y sus respectivas familias.
Familia Pereira en el hall del Palacio, al centro Carolina Iñiguez de Pereira, c. 1904. Colección particular Dolores Fernández Errázuriz.
Dibujo Palacio Pereira, c.1874, autor desconocido. Colección Museo Histórico Nacional.
1902
Una esquina destaca
La creación y embellecimiento de la Plaza Brasil, la canalización del canal Negrete, la transformación de Calle Huérfanos como paseo peatonal y la progresiva urbanización potencia al Palacio Pereira y sus lotes adyacentes. El edificio, aunque es uno de los más lujosos de Santiago, se ubica en la periferia, alejado del núcleo fundacional.
Vista del Palacio Pereira, Fotografía Jorge Walton, Álbum de Santiago y vista de Chile, 1915. Archivo Biblioteca Nacional.
1906
Muerte de Luis Pereira
El terremoto obliga a Luis Pereira a demoler y reconstruir un sector del Palacio. Tres años más tarde muere, quedando a cargo del edificio su viuda, Carolina Iñiguez, hijos, hijas y sus respectivas familias.
Retrato en fotografía de Carolina Iñiguez, fecha no identificada. Colección particular Dolores Fernández Errázuriz.
1932
Deja de ser residencia
El Palacio Pereira es adquirido por el Arzobispado de Santiago. Algunas de sus oficinas administrativas funcionan ahí hasta el año 1942.
1940
Otras remodelaciones
Un plano de alcantarillado de este año revela que el Palacio es propiedad de la Caja de Ahorros de Empleados Públicos. En el documento se puede apreciar que nuevas modificaciones han alterado su estructura, por ejemplo, el acceso construido por calle San Martín y que conecta directamente con las habitaciones del segundo piso.
Plano de alcantarillado, planta baja, 1940. Archivo Aguas Andinas.
1957
Analizando, midiendo, dibujando
El arquitecto José Henríquez, realiza los primeros levantamientos de arquitectura. Estos documentos sientan las bases de los estudios y proyectos posteriores de reconstrucción.
Plano planta baja y alta del Palacio Pereira, 1957, Claudio Fco. Brunet de Baines Luciano Ambrosio Hénault, José Henríquez. Archivo de Arquitectura Chilena, Facultad de Arquitectura y Urbanismo, Universidad de Chile.
1960 - 1968
Liceo Nº3 de Niñas
El Ministerio de Educación ubica el externado del Liceo Nº 3 de Niñas Mercedes Marín del Solar en el lugar. Los espacios antes residenciales adquieren usos pedagógicos: una de las salas del primer piso se usa como laboratorio de biología, mientras que habitaciones son habilitadas como aulas. En el exterior, el lujoso patio se convierte en una sencilla planta abierta para los recreos, y en su sector trasero se construye un gimnasio donde las estudiantes practican voleibol.
Alumnas Liceo N3, 1962. Archivo Silvia Correa.
1968
Un lugar de reunión
El Palacio inicia un proceso de gran deterioro material que se acentuará desde 1968 cuando el Liceo Nº3 abandone el edificio. Este fue luego sede del Liceo Nº26 Centro Humanístico Santiago Centro y casa de distintas federaciones de estudiantes: Federación de Estudiantes Vespertinos y Nocturnos de Chile, Federación de Estudiantes Industriales, Técnicos y Especiales de Chile y Federación de Estudiantes Secundarios de Santiago.
Estudiantes secundarios, alzando sus brazos, en encuentro FESES (Federación de Estudiantes Secundarios), c. 1970. Fotografía Mario de San Martín Mujica. Archivo Museo Histórico Nacional.
1973
Cese
Tras el golpe de Estado el Palacio es allanado por militares en búsqueda de armas. Sus dependencias habían servido como lugar de reunión para federaciones e individuos ligados al Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR). El operativo causó perjuicios materiales en el edificio.
1974 - 1975
Declaración patrimonial y desafectación
En pleno abandono, el Consejo de Monumentos Nacionales declara Monumento Histórico (Decreto Nº 1185) al Palacio Pereira. Un año más tarde se presenta la primera iniciativa de restauración del edificio para ser utilizado como la nueva sede del Archivo Nacional. A ella le seguirán más de veinte proyectos de resguardo e intervención durante cuatro décadas.
En el mes de agosto de 1975 el edificio es desafectado y deja de ser Monumento Histórico (Decreto Nº 677).
Decreto No 1185 dictado el 26 Noviembre de 1974. Archivo Consejo de Monumentos Nacionales.
1981
La nueva declaración y el deterioro
En manos de la constructora Raúl del Río, luego de múltiples gestiones, el edificio nuevamente es declarado Monumento Histórico (Decreto Nº 5746). Muchos de los atributos que merecieron su protección ya se habían deteriorado, vulnerado o incluso desaparecido.
Vista del Palacio Pereira por calle Huérfanos, c. 1980. Archivo Palacio Pereira.
1991
En medio de las transformaciones de Santiago
Con el retorno a un régimen democrático, entran en vigencia nuevas políticas de renovación urbana que consolidan las medidas impulsadas desde fines de los 80 por el Plan de Repoblamiento de la Municipalidad y la Corporación de Desarrollo de Santiago, y que propiciaban la edificación en altura integrando a capitales privados.
La zona en la que se emplaza el edificio entra en tensión con las estrategias de regeneración urbana y la densificación de las zonas céntricas, provocando consecuencias como el privilegio del valor del suelo por sobre el valor patrimonial.
Proyecto Alemparte Barreda & Asociados - Arquitectos, 1984.
La ruina como escenografía
El actor y director de teatro Alejandro Goic monta “Calígula” de Albert Camus al interior del Palacio, utilizando sus dependencias como símbolo de la ruina, el abandono y la decadencia.
Afiche obra de teatro Calígula diseñado por Andrea Goic, 1991.
1994 - 1999
Destinos posibles
Entre estos años gestiones de diverso carácter ponen la mira en el Palacio Pereira: los estudios de cabida para la nueva sede del Ministerio de Relaciones Exteriores y de la Subsecretaría de Desarrollo Regional y Administrativo llevados adelante por el Ministerio de Obras Públicas (1995-1996); el interés de la Dirección de Carabineros y de la Dirección Previsional, el «Estudio de Factibilidad Restauración Palacio Pereira», desarrollado para un programa genérico por la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas (1998); la propuesta esquemática de reforzamiento estructural, conservación y reconstrucción según el proyecto original (1999).
Entre los proyectos impulsados por el dueño del edificio a través de la Constructora Del Río Limitada e Inmobiliaria Maullín, están una propuesta por la oficina de arquitectos Alemparte Barreda y Asociados (1994) aprobada por el CMN (la oficina había elaborado tres propuestas anteriores en 1978, 1981, 1984); una confiada a la empresa de restauración de fachadas Berenguer (1996); dos encargadas a la oficina Castelblanco Arquitectos Asociados (1996, 1999).
Estudio de cabida, Dirección de Arquitectura, Ministerio de Obras Públicas, 1995-1996.
Proyecto Alemparte Barreda & Asociados Arquitectos, 1994. Archivo Consejo Monumentos Nacionales.
2000
Proyecciones de un espacio doméstico
Investigaciones académicas como la de Alejandra Yarur (2000), Mario Rojas y Fernando Imas (2012), permiten levantar información de la construcción original del edificio. Dichos trabajos logran identificar con bastante certeza la ubicación de los salones rojo, lila y azul; la biblioteca y los dos escritorios, el comedor principal, la sala de música y la de fumar, de la familia Pereira. Todos datos que el tiempo y el abandono habían borrado.
Planta primer y segundo nivel del Palacio Pereira. Basado en dibujo de Brügmann Antigüedades, 2012.
Vestigios como obra de arte
La escena artística también quiso relevar el abandono. El artista visual Enrique Matthey expone en el Museo de Arte Contemporáneo “La (re) ubicación de las cosas”, una obra trabajada con restos ornamentales del Palacio Pereira y que muestra el olvido y la invisibilidad en la que había caído el edificio.
Exposición “La (re)ubicación de las cosas” en el Museo de Arte Contemporáneo, 2001. Fotografía Jorge Brantmayer.
2003 - 2009
Más propuestas para el Pereira
La oficina Castelblanco Arquitectos Asociados presenta propuestas de recuperación del Palacio en los años 2003, 2008 y 2009, al igual que el arquitecto Gonzalo Martínez de Urquidi en 2009, la que contó con una fase de anteproyecto aprobada por el CMN (2009) y con un ingreso de proyecto (2011).
Las múltiples iniciativas, públicas y privadas, de usos administrativos y comerciales al Palacio (alrededor de 20 iniciativas desde los ochenta a la fecha), entre ellos un proyecto que construiría un edificio de 23 pisos dentro del Palacio, conservando solo su fachada.
Proyecto Castelblanco Arquitectos Asociados, 2009. Archivo Consejo Monumentos Nacionales
Proyecto Uno Arquitectos Asociados, 2009. Archivo Consejo Monumentos Nacionales.
2010
27 F
El terremoto del 2010 causa nuevos daños al Palacio, sumándose a otros cinco sismos de magnitud sobre 7 en escala de Richter que afectaron al edificio: 1958, 1965, 1971, 1985 y 1997. A pesar de ello, los estudios proponen que los problemas ocasionados por sismos son menores que los producidos por el abandono y la falta de mantención del edificio.
2011
De vuelta al Estado
Treinta años después de su declaratoria como Monumento Nacional, durante el primer gobierno del Presidente Sebastián Piñera, el Estado compra el Palacio con el objetivo de convertirlo en sede del Consejo de Monumentos Nacionales (CMN) y de la ex Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos (DIBAM), que hasta ese entonces no contaba con un edificio institucional propio.
Interior crucero Palacio Pereira, 2012. Fotografía Cristián Domínguez.
2012
El concurso
La Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos ahora Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, financia y desarrolla un concurso internacional para llevar a cabo la restauración del Palacio Pereira y añadir un edificio nuevo que interprete la tipología original del monumento.
El jurado estuvo compuesto por Francisco Hernández Díaz, representante Ministro de Obras Públicas (MOP); Magdalena Krebs Kaulen, Directora de la DIBAM; James Fry Carey, Director Nacional de Arquitectura del MOP, Luis Bresciani Prieto, representante del Colegio de Arquitectos y Juan Sabbagh, arquitecto.
De 31 propuestas, resulta ganador el proyecto “El arte de la negociación: La recuperación del Palacio Pereira”
de los arquitectos Cecilia Puga, Paula Velasco y Alberto Moletto, acompañados por el arquitecto Fernando Pérez Oyarzun y el británico, especialista en conservación, Alan Chandler. La propuesta propone reconciliar dos posiciones potencialmente antagónicas, la conservación y renovación del edificio.
El rol del Consejo de Monumentos Nacionales, en tanto organismo técnico, fue fundamental para el levantamiento de este concurso. Se llevaron a cabo importantes labores como: excavaciones arqueológicas, un estudio histórico, un levantamiento topográfico, un informe del estado estructural del edificio, un acabado levantamiento crítico del mismo y un detallado informe de los elementos constructivos y decorativos del inmueble que sirvieron para establecer los criterios de intervención del concurso.
Propuesta “El arte de de la negociación: La recuperación del Palacio Pereira”, 2012. Ilustraciones Alberto Moletto.
2013
Manos a la obra
Comienza el proceso de diseño y gestión de recursos para la reconstrucción y restauración del edificio, con el MOP como órgano ejecutor y supervisión del CMN durante toda la intervención.
Registro de ornamentos fachada Huérfanos, 2017. Archivo Palacio Pereira.
2016 - 2019
La restauración y la obra nueva
En 2016, durante el gobierno de Michelle Bachelet, se inicia la recuperación, consolidación y reparación estructural del edificio. El proyecto fue ejecutado y financiado por el MOP con dos misiones, restaurar y consolidar los dos pisos originales del Palacio y realizar intervenciones que dialoguen con el inmueble original: un edificio de hormigón de 6 pisos (2 de ellos subterráneos) para oficinas, un patio a cielo abierto y un auditorio.
Más de 40 restauradores trabajan para la limpieza y restauración de la fachada y muros interiores del edificio, hasta llegar a los tonos originales. Además se forman talleres de albañiles, carpinteros, yeseros y estucadores. En total, más de 200 personas participan de la obra.
Luego del término de la ejecución de las obras civiles se comienza la habilitación del edificio a cargo del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural.
Restauradores trabajando en el Palacio Pereira, 2016 - 2019. Archivo Palacio Pereira.
2021
El edificio que se abre a la comunidad cuenta con salas de exhibición, Centro de Documentación del Consejo de Monumentos Nacionales, cafetería, auditorio, patio y sala de lectura de uso público. Junto con la nueva construcción (4.675 m2) que acoge las oficinas de la institucionalidad patrimonial del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio; la Subsecretaría del Patrimonio Cultural, el Servicio Nacional del Patrimonio y el Consejo de Monumentos Nacionales, el edificio suma un total de 6.922 m2.
El Pereira constituyente
El Palacio Pereira ha sido escogido como la sede para el funcionamiento regular de las comisiones y servicios de la Convención Constituyente, cuyo mandato es discutir y presentar un nuevo texto constitucional para Chile.
Crucero Palacio Pereira, 2019. Fotografía Alexis Caro. Archivo Palacio Pereira.